No sé de dónde han salido estos Runa (bueno, tras leer un poco sobre ellos me he enterado que han formado anteriormente parte de grupos como Los Tiki Phantoms o Vórtice, con los que no tienen nada que ver en cuanto a sonido), pero lo que os aseguro es que desde que le he dado al play a su nuevo disco, se han ganado un hueco tirando a grande en mi discoteca y en mi corazón. A veces eso pasa con algunos LPs y conjuntos, que ya sea porque te enganchan en un momento concreto o porque su rollo es el que precisamente necesitas escuchar, te atrapan y se adhieren sin remedio a tu cabeza. Y eso es lo que me ha pasado con este “Rito estacional”. A base de guitarra, bajo y batería, es decir, que son un trío rockero de toda la vida, y con unas coordenadas sonoras que circulan por lo que vendría a ser el punk melódico (a veces post, a veces rockista, pero siempre conciso y acertado), Runa han creado uno de esos discos que va a quedarse en la memoria de los aficionados del género durante mucho tiempo. Y no lo recordarán únicamente “los cuatro de siempre”, sino que con sus interesantes letras, sus composiciones épicas pero sin llegar a ser pedantes (pero que hacen que levantes el puño de alegría y rabia bien encauzada, de eso no hay duda), y con su incuestionable entrega punkoide, pueden llegar a ser ese nuevo grupo que gusta a la gente a la que no le suelen gustar estos conjuntos musicales. Y eso siempre significa algo bueno. (Subnoise)